En el año 2019 Paco (Javier Hernández), amigo cercano, le regala a Jorge Fuentes la primer máquina de tatuajes, misma que lo introduciría al mundo del tatuaje; 1 año después funda la marca Santo Voltaje como una alternativa a una marca personal; Santo Voltaje busca tener presencia como un estudio de tatuajes que posteriormente se convierte en una extensión de diseños que se puedan producir bajo esta marca en distintos soportes ya que la piel no es el único fin. 

En el estudio diseñamos tatuajes a partir de tus ideas, buscamos asesorarte para obtener un buen resultado y que éste se refleje en un tatuaje duradero e impecable. En Santo Voltaje contamos con un espacio adecuado y cómodo para trabajar, seguimos las normas de bioseguridad, estamos abiertos a conversaciones sin prejuicios y música nueva, una cita cómoda es nuestra prioridad.